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» ¿Qué tipo de Inversor eres? Descubre tu perfil de Inversor

Escrito por Alba Martín | Nov 5, 2019 3:39:50 PM

Has decidido que quieres invertir pero no cuentas con los conocimientos financieros necesarios. La primera pregunta que hay que hacer es ¿qué tipo de inversor eres?

Un inversor es aquella persona o institución que realiza una inversión en un negocio con el fin de conseguir una ganancia a corto o largo plazo.

Algunas de las inversiones más habituales son la compra de inmuebles, con la esperanza de que se revalorice en los próximos años o la creación de un negocio  para que proporcione beneficios.

Pero existen otras opciones, como invertir en productos financieros o en diferentes empresas. Sin embargo, antes de actuar, debes hacerte una serie de preguntas que te ayudarán a saber cuál es el mejor camino para ti.

¿Cómo saber qué tipo de inversor soy?

Definir qué tipo de inversor eres es el punto de partida para saber qué decisiones tomar y para ello se deben tener en cuenta una serie de factores:

  • Duración de la inversión
  • Aversión al riesgo
  • Retorno esperado
  • Necesidad de liquidez

En función de estos parámetros se diferencian tres tipos de inversores: los conservadores, los moderados y los arriesgados.

 

 

Perfiles de Inversor

  • Inversor Conservador

El tipo de perfil inversor conservador es el más habitual entre los ahorradores. Se puede identificar por una baja tolerancia al riesgo en las inversiones. Algunas de las características que más valora a la hora de colocar sus ahorros son la confianza en el producto y la protección y seguridad de su dinero.

Por tanto, es un perfil que está dispuesto a asumir un riesgo bajo, lo que supondrá a su vez una baja rentabilidad.

« Son aquellos ahorradores que pueden preferir obtener menores rentabilidades a cambio de asegurar la preservación del capital ». -  CNMV

En este grupo destacan aquellas personas mayores de 45 años que ya han realizado las adquisiciones económicas más importantes, como pueden ser la compra de una vivienda, coche o la educación de sus hijos.

A partir de este momento, lo que buscan es el mantenimiento de sus ingresos sin la intranquilidad de una inversión de alto riesgo.

Un inversionista conservador puede ahorrar colocando sus ahorros en diferentes activos. Entre los fondos en los que suelen invertir este tipo de perfil destacan los de renta fija a corto plazo ya que permiten conocer la rentabilidad de antemano y han sido más seguros que aquellos de renta variable.

Hay renta fija pública como la deuda que emiten los Estados, administraciones y organismos públicos para financiar sus gastos y privada como la emitida por empresas que buscan financiación para poder llevar a cabo sus proyectos o ampliar capital.

Otro tipo de inversión son los fondos garantizados. La característica principal es que aseguran la recuperación del capital inicial invertido, en una fecha concreta y con una ganancia asegurada.

Además, hay que tener en cuenta que las franquicias han demostrado ser una de las formas de emprendimiento más atractivas y menos arriesgadas del mercado actual. 

¿Quieres saber más sobre cómo elegir tu franquicia?   Descúbrelo aquí.


  • Inversor Moderado

El perfil moderado tiene generalmente experiencia en inversión y su principal objetivo es el equilibrio entre la estabilidad y el crecimiento de sus ahorros, por lo que admite una aversión al riesgo a medio plazo. 

Este inversor conoce que la inflación puede afectar a su poder adquisitivo, por tanto asume un riesgo controlado buscando inversiones más o menos seguras.

En este grupo destacan inversores por debajo de los 45 años aunque también se puede encontrar ahorradores ya jubilados con una tolerancia mayor al riesgo que la propia del perfil conservador.

Al igual que los anteriores, siguen valorando aspectos como la seguridad y la confianza del emisor pero equiparan la importancia de estos factores a la rentabilidad obtenida.

Pueden invertir en bolsa, comprando directamente acciones en el mercado y otros activos de riesgo similar o comprando inmuebles para alquilarlos y recuperar la inversión a medio-largo plazo cuando valgan más. 

  • Inversor Arriesgado

El perfil inversor arriesgado busca maximizar la rentabilidad de su inversión siendo por consiguiente su tolerancia al riesgo alta. Su horizonte se sitúa al largo plazo por lo que admite rentabilidad negativa en el corto plazo que a veces, puede prologarse durante periodos más largos.

Inversores experimentados destacan en este grupo, conociendo ampliamente el mercado de la renta variable invirtiendo en este entre el 60% y el 100% de sus activos.

 «En un mundo que cambia realmente rápido, la única estrategia en la que el fracaso está garantizado es no asumir riesgos ». - Mark Zuckerberg

Dentro de esta clasificación existen diferentes niveles, no son casos cerrados. Hay inversores arriesgados que lo serán más que otros, inversores que prefieren no correr riesgos pero que en un momento dado invierten más… cada persona puede ir moviéndose y cambiar de un perfil a otro.

 

Tipos de Inversores Perfil Conservador Perfil Moderado Perfil Arriesgado
Aversión al Riesgo Alto grado Medio grado Bajo grado
Rentabilidad Baja rentabilidad Media rentabilidad Alta rentabilidad
¿Dónde invertir? Renta fija, fondos garantizados... Bolsa, compra de inmuebles... Renta variable, fondos de inversión de alto riesgo...

 

Sin embargo, independientemente de qué tipo de inversor eres, existen unas reglas básicas a la hora de invertir que no se pueden evitar si quieres tener éxito:

  1. Infórmate y sé prudente
    Antes de colocar sus ahorros, es conveniente informarse o investigar cuales son las diferentes opciones. Se puede realizar de forma personal o acudiendo a expertos que asesoren.

  2.  Diversifica
    La regla de “no poner todos los huevos en la misma cesta”. Es decir, no invertir todo el patrimonio en los mismos tipos de activos, ya que pueden estar relacionados. 

  3. Establezca límites
    Muchos expertos recomiendan evaluar desde el primer momento el porcentaje de pérdidas que se está dispuesto a perder. Por tanto, se debe invertir solo los excesos de liquidez.




  4. Controla las emociones

    El mundo de las finanzas es muy interesante pero es imprescindible aprender a gestionar el temperamento y no permitir que nuestras emociones afecten a nuestras decisiones.

  5. Invierte en lo que entiendes

    Será fácil sufrir pérdidas si se destina dinero a activos que se comportan de forma imprevista, por tanto, dedica tiempo a comprender en lo que se invierte ya que como decía Benjamin Franklin “La inversión en conocimiento es la que genera el mayor interés”